El majestuoso volcán Iztaccíhuatl, una cumbre sagrada
El nombre de este volcán inactivo situado en los límites de los estados de México y Puebla proviene de la lengua náhuatl, en la cual significa “mujer blanca”. Este lo toma por la pareidolia que forman sus cumbres nevadas que asemejan la silueta de una mujer recostada, la cual protagoniza la popular leyenda del guerrero enamorado Popocatépetl y la princesa durmiente Iztaccíhuatl.
Al igual que su compañero, el Popocatépetl, fue considera por las antiguas culturas prehispánicas como una montaña sagrada. En las investigaciones arqueológicas que se han realizado en su cima, se han hallado diversos materiales de carácter ritual, como vasijas que representan a Tláloc e incensarios. La mayoría de estos objetos se han datado en el Posclásico Tardío, por lo que se puede deducir que la cumbre del Iztaccíhuatl fue un sitio al que se peregrinaba regularmente en los dos siglos anteriores al contacto con los españoles.