El INAH fortalece vinculación comunitaria con acciones de atención al patrimonio de Tepoztlán, Morelos

Con el propósito de robustecer la participación ciudadana en materia de cuidado y preservación del patrimonio, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), elabora manuales de conservación preventiva para atender nueve capillas y templos ubicados en el pueblo de Ixcatepec y en los ocho barrios de Tepoztlán, en Morelos.

Se trata de un esfuerzo conjunto en el que participan el Centro INAH Morelos, el Museo del Exconvento de la Natividad de Tepoztlán (MENT) y habitantes de la región, el cual deriva del primer Foro de Conservación Preventiva en Tepoztlán, en que participaron investigadores, restauradores, profesionales del campo de la conservación y ciudadanos involucrados en la custodia de dichos espacios, así como del programa de participación y vinculación comunitaria desarrollado por el MENT.

La actividad se dividió en tres fases: la primera constó de un seminario teórico-metodológico de seis sesiones, realizado julio a septiembre de 2024; la segunda, de un taller de impermeabilización, preparación de barnices y uso de pastas con cal, el cual tuvo lugar del 18 al 22 de noviembre de 2024. 

La tercera etapa corresponde a la creación de los manuales, basados en el análisis de las necesidades específicas de cada inmueble, los cuales datan del siglo XVI al XVIII y están bajo la tutela de las mayordomías de los barrios de San Miguel, Santo Domingo, San Pedro, San José, La Santísima, San Sebastián, Santa Cruz, Los Reyes y el Pueblo de Ixcatepec, informó, el director del MENT, Víctor García Noxpango.

“El objetivo es que las mayordomías cuenten con instrucciones de conservación preventiva y de atención, tanto estacional como periódica, para estos recintos”, apuntó el museólogo al resaltar que estas guías son elaboradas en colaboración con el Área de Conservación del Centro INAH Morelos, a partir del manual del MENT, creado por la restauradora Beatriz Sandoval, para lo cual se adecúa la información a las características y requerimientos de cada inmueble. 

García Noxpango explicó que la conservación preventiva son todas aquellas acciones que reducen y previenen en un porcentaje relevante el desgaste de un objeto o un inmueble, desde la limpieza hasta su resguardo. 

“Los documentos, los cuales se prevé entregar este mes, se darán de manera impresa, para que se incorporen a los archivos parroquiales”, con el propósito de que las futuras administraciones puedan continuar con la aplicación de las medidas de protección y cuidado establecidas.

Otro impacto positivo derivado de esta iniciativa es que “las propias mayordomías adquirieron conciencia de la necesidad de un área de conservación dentro de su propia estructura”, lo que les permitirá llevar un registro de las intervenciones a los inmuebles y tener un archivo de identidad para la propia localidad.

El primer foro, a cargo de la restauradora del Centro INAH Morelos, Frida Mateos González; la investigadora de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones, Mónica Martí Cotarelo, y el titular del MENT, permitió establecer un puente de diálogo con las mayordomías, las cuales conocieron de manera más profunda las acciones del INAH en materia de atención técnica del patrimonio edificado.

El museólogo añadió que, “además se obtuvo información y conocimiento de cuáles son las formas de apropiación, funcionamiento y cambios de las mayordomías que tienen estos espacios a su cargo”.

La elaboración de los manuales ha sido una labor de acompañamiento en cada una de las poblaciones, con la intención de dar seguimiento al proyecto, a partir de la red establecida entre agentes vinculados e interesados en participar y conocer sobre la historia, sentido y conservación de los espacios que tienen bajo su tutela.

Por último, García Noxpango agradeció a la Secretaría Técnica del INAH por el apoyo y la confianza a este proyecto.